Seminario Online – Instructores de Japón

JKS Argentina ha organizado seminarios online en vivo con instructores de Japón a través de la plataforma Zoom.

Es una gran oportunidad para seguir absorbiendo conocimientos
de nuestro arte marcial directo de las raíces en estos tiempos de incertidumbre.


Okamoto Sensei: Sábado 1° Agosto – 9 am (Arg)

Yamaguchi Sensei:  Sábado 22° agosto – 8.15 am (Arg)


Para mas información, contactarse al teléfono +54 11 5952 1102.

Los datos necesarios para unirse se informarán por privado.

Oss!

Seiken Karate Dojo

Gasshukku 2019 – Tandil

Alumnos e instructores de JKS Argentina han completado el Gasshukku 2019 en la Ciudad de Tandil, Provincia de Buenos Aires durante el fin de semana de Carnaval.

La sede fue el Club Nahuel, donde próximamente comenzará a impartir clases el instructor Damián Parasuco en el dojo Shingitai. El seminario fue impartido por Sensei Maehamasaki, Jefe Técnico de la institución con la presencia de Sensei Montenegro, representante del mismo.

Se realizaron dos clases diarias, donde los tres pilares del karate (kihon, kumite y kata) fueron cubiertos por el Sensei en vistas de las próximas competencias y seminarios a realizarse durante el año. Por supuesto, cada clase comenzó y terminó con el necesario ‘sooji’ (limpieza).

Pero el karate no se practica únicamente en el dojo. Caminatas por el dique, subida al Cerro de las animas con Damián Parasuco como guía, y un asado de camaradería en el Valle de Tandil Country Club, fueron solo algunas de las actividades realizadas durante el fin de semana donde se vivió un clima ameno y alegre.

Agradecemos a los participantes de JKS Argentina por su participación y energía en el Gasshukku 2019.

Oss!

Galería

Resultados 2º Torneo Nacional 2018, Posadas, Misiones

Seiken Karate Dojo participó en el Torneo Nacional JKS Argentina 2018, sito en el Club Alemán de la ciudad de Posadas, Misiones.

Agradecemos a Diego Fleitas y Carlos Chanuar, organizadores del evento y a la comisión técnica de JKS Argentina.

Fue una gran experiencia para todos los competidores que lograron los siguientes resultados.

RESULTADOS POR CATEGORÍA

KUMITE

Kumite Individual Juveniles 14-17 años +1ºdan

1° Zarza, Alejandro (Misiones)

2° Benz, Alejandro (C.A.B.A. – Seiken)

3° Reineck, Lucas (Misiones)

 

Kumite Individual Mayores Femenino – +1ºdan 

1° Salas, Catalina (C.A.B.A. – Seiken)

2° Herrera, Gabriela (C.A.B.A. – Seiken)

3° Azzato, Agustina (C.A.B.A. – Seiken)

Kumite Individual Mayores Masculino -3ºkyu

1° Ibarra, Esteban (C.A.B.A. – Seiken)

2° Briozzo, Fernando (ASKA)

3° Gonzalez Caballero (Chaco)

 

Kumite equipo mayores Masculino

1°  C.A.B.A – Seiken (Blanco, Pablo; Díaz, Dante; Barrios, Leandro)

2° Misiones A (Baez Nuñez, Saul; Zarza, Alejandro; Fleitas, Diego)

3˚ Misiones B (Reineck, Lucas; Amaro, Brian; Chanuar, Carlos)

KATA

Kata Mixto Mayores -3°kyu

1° Briozzo, Fernando (ASKA) 

2° Blanco, Florencia (ASKA)

3° Dávalos, Gloria (C.A.B.A. – Seiken)

Kata Individual Masculino +4° kyu

1° Fleitas, Diego (Misiones)

2° Díaz, Dante (C.A.B.A. – Seiken)

3° Zarza, Alejandro (Misiones)

Kata Equipo Mayores Mixto:

1° Misiones (Baez Nuñez, Saúl; Quiróz, Fabiana; Fleitas, Diego)

2° C.A.B.A – Seiken (Azzato, Agustina, Herrera Gabriela, Salas, Catalina)

3° Chaco (Franco, José; Gutiérrez, Francisco; Orrego, César)

Resultados – 1° Torneo Sudamericano – Temuco, Chile

Integrantes del Dojo Seiken participaron durante los días 28 y 29 de julio del 1° Sudamericano JKS en la ciudad de Temuco, región Araucanía, Sur de Chile; así como también del curso previo dictado por Uriu Sadamu Shihan, (9°dan JKS). La organización de los eventos estuvo a cargo de ILKSS (chile) y fue avalado por JKS Latinoamérica.

El Sensei Daniel Maehamasaki formó parte de la delegación como Director Técnico de JKS Argentina y juez en conjunto con Ariel Montenegro, representante oficial de la organización a nivel nacional.

Tanto durante el curso como durante la competencia se vivió un atmósfera de amistad y cooperación entre los 200 competidores, jueces y directivos de todas las naciones participantes (Argentina, Brasil, Chile y Perú).

Varios alumnos de Seiken Karate Dojo tuvieron el honor de ser parte del seleccionado nacional, representando a la Argentina y trayendo a casa algunos recuerdos. Luego de la competencia, compartieron una cena y fiesta. 

El Dojo agradece la colaboración de los compañeros, amigos y padres, por el acompañamiento y apoyo constantes antes, durante y después de estos acontecimientos.

 

Resultados

INDIVIDUAL

Categoría Mayores Femenino – dan

Kumite individual:

  • Bronce: Salas Catalina (C.A.B.A – Seiken)
 

Kata individual:

  • Oro – Herrera Gabriela (C.A.B.A. Renacimiento)
  • Plata – Salas, Catalina (C.A.B.A. – Seiken)
 

Categoría 14/15 años – kyu

Gabriela Rojas (San Nicolás)

  • Kata – Plata
  • Kumite – Plata

Categoría Mayores Masculino – dan

Kumite individual:

  • Oro – Fleitas, Diego (Misiones)
  • Plata – Marc, Patricio (San Nicolas)
 

Kumite Senior Masculino

  • Plata – Chanuar, Carlos (Misiones)
 

Categoría 17/19 años – dan

Alejandro Zarza (Misiones)

  • Kumite – Oro
  • Kata – Oro 
 

EQUIPOS

Kumite Equipo Mayores Femenino

Argentina – Oro

Integrantes: Azzato, Agustina (C.A.B.A. – Seiken), Herrera, Gabriela (C.A.B.A. – Renacimiento); Salas, Catalina (C.A.B.A. – Seiken)

 

Kumite Equipo Mayores Maculino

ArgentinaPlata

Integrantes: Parasuco, Damián (Tandil) ; Cardozo, Pablo (Avellaneda); Blanco, Pablo (Caseros); Fleitas, Diego (Misiones); Marc, Patricio (San Nicolás)

Kata Equipo Mayores Femenino

Argentina – Oro

Integrantes: Azzato, Agustina (C.A.B.A. – Seiken), Herrera, Gabriela (C.A.B.A. – Renacimiento); Salas, Catalina (C.A.B.A. – Seiken)

 

Kata Equipo Mayores Masculino

Argentina – Plata

Integrantes: Marc, Patricio (San Nicolás); Barrios, Leandro (C.A.B.A. – Seishin); Fleitas Diego (Misiones)

El Cambio de Siglas y de Escudo no es lo mismo que el cambio del Camino

Cada uno sabe cuando llega su maestría, y es cuando se comienza a caminar, y te das cuenta de tu soledad ante tremendas decisiones que te ofrecen las bifurcaciones de la vida, pero ante ellas siempre consultarás a tus afectos cercanos diferentes puntos de vista, e inmediatamente el silencio invadirá tu rededor, la realidad pura, solo, nuevamente¡¡ Y decidirás, ¿sobre qué?, sobre que se construye y se ha construido la decisión a tomar ¿ante el pasado?, si, tal vez, montones de recuerdos, viajes imborrables, afectos compartidos, grandes enseñanzas, desilusiones y alegrías invaden tu mente, pero lo mas importante es que en ese mismo punto al pie de los dos caminos,  dirás ¡¡debe haber un futuro¡¡ y este debe ser la nueva meta, lleno de esperanzas, donde siempre las páginas nuevas tienen ese sabor de la intriga, pero con la confianza de haber elegido el buen libro.

Hoy he decidido honrar mi pasado, pero con vista al presente y al futuro en un gran camino a construir, con decisión, con firmeza y confianza, la confianza que me dieron los que cuando volteé a ver sobre mis espaldas allí estaban, la legión, esperando mi paso, y entendí que todo lo que tiene que suceder sucede, de golpe, todo junto y sin aviso.

Pedí señales? Si, las pedí, y me la dieron inmediatamente, pedí una segunda señal, y si¡¡ los grandes Kami del destino me volvieron a dar,  pedí ver las bajas, y me dijeron, serán solo los que alguna vez ayudaste…si… siempre sucede así… ¡no te aflijas, escuché…, ¡el trabajo es para ti, no para ellos¡¡¡ me dijo el Kami, el guardián más cercano, y fue entonces que no me afligí, me acordé de los que me señalaron que no lo hiciera, y me di cuenta que no pensaban en mi, sino en lo que perdían Ellos, y me decidí…. di el gran PASO… ahora… a Caminar y seguir construyendo hasta el final del camino… pero por el bien de mi legión…

OSSU

Feliz Navidad y próspero año Nuevo¡¡

 

Eiken Hamasaki

Mi Último Refugio y el Camino con mi Maestro

Volví de la provincia a mi querida y nunca bien amada Buenos Aires, y vivía lejos de Samurai y mas lejos aun por mi economía estudiantil, así que intenté ir a Karate Club de Carlos Prina, e intenté verlo a Sergio Ulloa porque lo consideraba el mas técnico de todos los Argentinos…, pero nada de eso ocurrió, luego de un tiempo, comencé a trabajar un una empresa de renombrada marca japonesa, con dueños japoneses, muy afamada, me lleva mi primo Jorge, pues me daba tiempo para estudiar en aquella época, 1980.

Allí, con otro compañero de trabajo trato de incursionar antes que nada, en otra escuela de Karate, la del profesor Takeshi Miagui, después de ver una clase me pareció lo más tradicional después de Samurai.

El primer intento: el maestro no estaba y nos volvimos. El segundo intento, día sábado, lluvia torrencial, estábamos en moto y con Julio mi compañero nos quedamos en su casa viendo películas en Beta Max (toda una novedad para la época…)

El lunes siguiente en el trabajo ya había llevado nuevamente el bolso porque decidimos no fallar ese día nuevamente, la tercera es la vencida le dije…, pero algo ocurrió sorpresivamente…

El ascensor se abre y sale de el Sensei Inoue¡¡¡, lo veo pasar por delante de la oficina de administración, y va directo a hablar con el dueño de la empresa, Murase San.

-¿Lo viste?- me dice Julio.

-¡Si!- le respondo.

-Bueno espéralo cuando salga y háblale¡¡-

Nervios y escalofrío de timidez, habían pasado muchos años del último torneo Argentino, muchos de la última vez que fuera a Concordia.

Lo espero en el pasillo, y al verlo lo saludo -¡¡Oss Sensei¡¡-

Me mira, y trata de recordar…

-¡¡Que hace vos aquí?¡¡

-Trabajo aquí Sensei¡¡-

-¡¡Que bien¡¡ venga a practicar¡¡-

-¡Oss¡¡-

-¡Salgo a las 6, Sensei¡¡-

-ok, a las 7 espero¡-

-¡Oss¡ estaré allí¡¡¡-

Desde ese reencuentro toda mi vida se construyó, de casa al trabajo, y del trabajo a Samurai, y nuevamente a casa. Sentí como si una fuerza poderosa obstaculizara el camino que estaba por tomar, y lo enderezara hasta ese lugar, esa hora, ese día, ese instante ¡¡feliz¡¡ de encontrar el enlace nuevamente, de unir constelaciones de vida…. Además, con tanta exactitud, pues lo económico ya no era impedimento, tenia empleo¡¡.

Al llegar y entrar todas la caras voltearon hacia mi, con signo de interrogación, e inmediatamente comenzaron a probarme distintas graduaciones, ya era un competidor consumado, nada mas que fuera de estado, pero enseguida supe que estaba en SAMURAI, y su ambiente de gran fricción, donde los egos flotaban en su aire, fue así que tuve que exponer el mío, para obtener respeto, pero después de las contiendas siempre mi mayor cordialidad, el grupo era muy exclusivo, y su fama de pertenecer no era tarea fácil…, pero supe ganarme la confianza de mis compañero y construí las grandes amistades de hoy.

Han Pasado 33 años, desde que pisara aquel ambiente ideal…

¿lo pinté? SI, varias veces, los kohai escapaban porque sabían que les ocuparía otro fin de semana más¡¡. -¿de qué color?- ni Sensei lo sabría, en su sorpresa solo nos decía -¡¡me gusta¡¡- o -¡¡no me gusta!!- y a pintarlo otra vez.

Levante su piso, lo hicimos mas que flotante, pusimos gomas en sus tirantes con la ayuda de los kohais de aquella época, antirruidos, para que no se quejara Pericles, y otra semana santa en Samurai.

Pero más allá de eso, y mi espíritu en su nombre, como narrara un compañero de Uruguay, -Viví sus gritos a reunión,  múltiples kiai, kihon, y el kata que nunca hicimos, kumites, golpes, nombres, apellidos,  gestos; los tuyos y los míos, hacer la mejor técnica para que Sensei lo notara, la alegría de lograrla y su  reto por no hacerla, cansancio, olores, salivar por la ventana y el sonido  del Shinai en nuestras cabezas para corregir el repugnante hecho. -¡¡Danieee¡¡ makiwara¡¡- y nudillos sangrantes otra vez.

Espiar por el pasillo para saber si estaba, tertulia de vestuario y continuar transpirando pensando en decidir si podría aguantar otra clase más. Ir a entrenar en soledad…, subir la oscura escalera, empujar su vieja y crujiente puerta de hierro, con el temor de que tal vez el espíritu de Michihisa me recibiera, y el honor de portar su llave…

No tuve el tiempo de despedirme como corresponde, pero fue y será siempre en mi corazón “El ambiente Ideal de crecimiento interior de jóvenes que creímos en otra forma de vivir”

OSS!!

Samurai

Caminar desde la NADA

“Bullying” (¿por qué?)

¡Si¡ sumergido en mi, en el ida y vuelta, que es lo que provoco? sabiendo sin saber?.-

Serán los vértices que no domino?, seré muy lindo que lastimo?, seré muy feo y no coincido?, seré omnipotente o muy sumiso?, pero aparezco en lugares donde no me desean y no me gusta estar donde nadie va, será mi castigo ser quien soy?, ¿que habrá en  mi naturaleza?.- Ya se¡¡ será la falta de éxito de mis padres, ellos tienen la culpa¡¡ SI¡ me obligan a lugares donde no pertenezco¡¡ ok buscare de ir y encontrar amigos mas humildes,.-He¡¡¿Por que me dejan solo¡¡ ustedes también?.- Vengan Che¡¡no vine a mostrar lo que tengo ni hacer caridad, quiero solo que me acepten, OK, nadie escucha, estoy solo otra vez¡¡ me voy con los solos es lo mejor.¡¡-

Los solos no cuestionan¡. se esconden, no preguntan en las nubes no hay clases ni critican como visto,- solo piden un paquito, una chala o un raviol,  y todos juntos en neblinas Tal vez sea lo mejor.—

¿PERO QUE ES ESO QUE HACE?¡¡¡ que esta haciendo ¿señor?-

-¡KARATE¡¡ ¡ ven a mi lado aquí, acompáñame¡-

-No creo que pueda-

-Nadie sabe que sabe, el cuerpo despierta cuando lo pones en movimiento-

– Por qué debo respirar así?-

-Porque el oxigeno es rico en alimentos-

– Por qué empiezan a dolerme mis músculos?-

-Están adquiriendo nueva dimensión-

– Por qué debo buscar exactitud en estos movimientos?-

-Porque el arte es la manera de ser justo en las acciones-

– Por qué cuanto más practico siento estar más calmado?-

-Porque encuentras el punto de partida en tu interior-

– Por qué no puedo ya dejar de practicar?-

-Porque empiezas a comprender sin comprender-

– Por qué siento que cuanto más Practico menos se?

-Porque estas en el camino del todo y de nada¡-

– Por qué ya no me obsesiona obtener y pertenecer?-

-Porque comienzas a entender La Nada¡-

– Por qué me obsesiona seguir practicando?-

-Porque quieres comprender El Todo¡¡

Maestro ya han pasado muchos años, comprendí que el corazón debe ser como el agua, persistente a veces para ahuecar la piedra, y fluir para llenar los huecos y asi adaptándose a todas las circunstancias para encontrar el nivel de comprensión.-

Y que tomando el vacío como camino, entendí que el camino es el vacío.-

He encontrado en Mi, la fortaleza¡¡, entender que lo que debo y lo que quiero no es la misma cosa, para vivir en el desquicio entre las tormentas.-

OSS¡¡Sensei¡¡

Eiken Hamasaki

Unir Constelaciones – Capítulo IV

La visita

¡Che! ¿cuánta plata hay que reunir?, -la pregunta de rigor-. ¿Y si lo traemos en Ferry?, jaja!, Bueno, -dice Pedro-, yo me encargo del pasaje, ustedes se encargan de juntar para la estadía, ok? ¡No!, no es justo, -responde Tito-, lo pagamos entre todos, ¿está bien?, y nos ponemos a trabajar, ¡tenemos un mes!

Y así fue. En primer lugar, todos  se confeccionaron el Karategui, cual traje de recepción; Segundo, saber donde sería la práctica, y tercero organizar su estadía. Y comenzó el delirio: Meneguin había pintado al óleo un cuadro gigante de Sensei Itaya, como de 2 metros de alto por 1.50 de ancho más o menos, copiado de la foto tradicional del libro de técnicas del instituto Samurai provisto por Humeres, como artista que era, y por primera vez vi el Dojo Kun pintado, escrito, y el tigre del Shotokan con fondo rojo y sus negras líneas, todo un acontecimiento, fuimos a ver las pinturas a su casa ( particularmente yo que venía de una religión sintoísta, me pareció muy pomposo, pero así quedó ya que era lo único como retrato que teníamos de aquel su Maestro).

El Tigre como emblema nos impresionó, era de una atracción increíble, su pose, la expresión en su silueta solo por sus rayas, motivando el Ying y el Yang entre sus líneas y espacios vacíos, todos nos imaginábamos tenerlo alguna vez bordado en el karategui. Hoy en día se los tatúan en su propia piel cual yakuza vernáculo.

Finalmente se optó por pedir el salón central del colegio de Artes Visuales por su nombre y la comodidad de encontrarse en pleno centro de la ciudad para el sábado de tarde, y el Centro Español para el Domingo media mañana. Realizamos varios asados para la recaudación de los fondos,  reservamos su habitación de hotel, -no había buenos en aquella época-, recién se estaba construyendo el “Salto Grande”, y así fue que, -si la memoria no me falla-, el Hotel Colón fue el elegido, al lado del Departamento de Policía.

Ya todo estaba listo, la cantidad de practicantes había aumentado, éramos aproximadamente 20 alumnos, todos intrigados,  ni hablar nuestro reducido grupo organizador, nerviosos es poco decir, como a toda gran personalidad, queríamos darle lo mejor,  hasta discutir con que coche ir a buscarlo el sábado por la mañana al aeródromo “Pierrastegui”, por aquella época los vuelos del Avro, un turbohélice, no eran frecuentes, y el día tan esperado había llegado.

En las viejas épocas el informe de aterrizaje no era preciso,  siempre se demoraba, vaya uno a saber por qué, y cuando preguntábamos, las explicaciones desconcertaban aun más, así que ese día Sanabria y Humeres lo van a buscar, el aeródromo quedaba  lejos por lo menos 30 minutos de viaje, al llegar empezaron a preguntar si el vuelo había llegado y les contestan: ¡Hace rato Chamigo¡, -¡No!!!, -expresaron-, ¡entonces no vino!!!, ¡perdió el vuelo!, -o lo peor-  ¿Dónde se metió este Japonés?, -vociferaba Sanabria hasta que se dan vuelta y… el Maestro Inoue estaba tras de ellos, sentado en un tronco, con el bolso entre sus piernas esperando. Ambos, sin saber tanto el protocolo, se le acercan y lo saludan pidiendo las respectivas disculpas. Solo dijo: ¡¡¡Tarde!!!, como verán empezamos mal!!! Vestía un traje gris claro de solapas anchas, pantalón Oxford, botas y una polera clara, a la moda en aquellas época de los 70, el pelo bien corto, y su pronunciado mentón, a todos llamaba la atención su altura, pues para ser japonés era alto, 1.80 mts y 23 años de edad aproximadamente. Cuentan que solo mira a Pedro, poniendo sus cejas en “V” y fue suficiente, apretón de manos y se encaminan al auto de Sanabria, sin mediar palabra, 30 minutos de silencio, sin saber que pronunciar, el Maestro no manejaba el castellano.

Así fue que la presencia de El en la ciudad fuera novedosa para los que practicaban  algún arte marcial o tenían interés por el, todos estaban a la expectativa de ver a un verdadero practicante de karate en acción, y sobre todo venido del mismísimo Japón.

Lo alojan a Sensei en el hotel, y a seguir los preparativos con el grupo de practicantes para que nada fallara o faltase, repasábamos quien abriría el local, su limpieza, la disposición de los asientos, ya que mucha gente vendría a conocerlo, -entre ellos mi abuelo y traductor-, donde se cambiaria, donde seria el almuerzo, la cena, etc. Todos los detalles del caso, Pedro lo llevaría a almorzar y después lo dejaría en el hotel para que descanse, pero lamentablemente no fue así, el no estaba acostumbrado a dormir siesta como Sanabria y los demás del pueblo hasta las  cuatro de la tarde ¡Buenos Aires tiene otro ritmo! ¿No duermen siesta en Japón? vociferó Tito, y pregunta ¿Pedro, donde lo llevo?, ¡No se!, -dice Pedro-, pásalo a buscar y entreténlo…

Tito me pasa a buscar  y vamos al hotel, allí estaba con su traje gris. Se sienta en el lado del acompañante y partimos, en silencio. Después de dar la tradicional vuelta de la plaza principal, encaramos directo al San Carlos, a ver el Castillo, esperando que le gustara, pero entrando en la ruta, Sensei al parecer no se aguanta el silencio, toma un cassette de la guantera, venia de un país más adelantado tecnológicamente, así que cassette en mano, lo estrella contra el dial de la radio, (al parecer en Japón el dial es retráctil y deja paso al cassette) ¡¡¡NOOO!!! -grita Sanabria- ¡¡¡y a la Mierda el dial, jajajaaaa!!!, el Norman (nombre de modelo del pasa-cassette), lo tenia del otro lado del volante.

Es así que le saca el cassette de su mano y lo inserta en el Norman para que escuche “Los Cuatro Soles”, la música del gusto de Tito, y que yo detestaba, jajá ¡¡no podía parar de reírme!! Sensei que no sabia como pedir disculpas ¡¿no anda esute?! -pregunta Sensei-, y yo reía. La cara de Tito ¡¡¡de no creer!!!.

Bajamos en el castillo, había algunos tomando mate, y lo ven a El de traje a pleno sol, se dan todos vuelta a mirarlo, a mis 14 años no era orgullo lo que sentía, quería esconderme detrás del guarda barro del auto para pasar desapercibido, pero nada, seguíamos junto a EL sacando pecho, ¿Viejo esute?, Si, -respondo-, Muy viejo, mirando el castillo, y Sanabria me dice: ¡¡me hizo mierda la radio!!, jajaja me rio, Sensei me mira sin saber de que hablábamos y trato de morderme la lengua y aguantar… lo paseamos por el castillo, volvemos al auto después del recorrido y lo llevamos a la orilla del rió a ver los Saltos Chicos, caminaba por la arena y el  pedregullo, lo noté molesto, parece que cuidaba sus botas, ya había pasado una hora y todavía faltaban tres, donde mierda mas lo podíamos llevar?,  así es que empezamos a tirar piedras al río y ver quien hacia más cantidad de sapitos…jaja!, de pronto estábamos los tres haciendo lo mismo y eligiendo piedras chatas para mejorar los tiros jaja! En ocasiones es al día de hoy que recordamos con Sensei aquella tarde y nos reímos aún pasados los años.

Obviamente que el recorrido siguió por el Balneario viejo, donde naufragara mi carpeta de geografía, y el viejo puerto y la cancha del Libertad.

Volvimos al centro y la única confitería abierta se llamaba “Para Mi”, ó en su esquina de calle Buenos Aires “Lion D´or” donde ofrecían pizzas y cervezas, así que tomamos un café mientras lo seguíamos observando detenidamente, hasta llevarlo al hotel. Le dijimos que lo pasaba a buscar Humeres y nos fuimos, Sanabria seguía refunfuñando y probando que su radio funcionara, jajaja!.

Todos ya estábamos cambiados de karategui esperando su llegada, al entrar cual artista marcial, por los comentarios que habíamos hecho desde hacía un mes atrás,  todos caminaban detrás de El. -Pedro nos dice- ¡Vayan para el salón¡, y lo acompaña a cambiarse, la gente expectante trata de espiar, El con su Karategui impecable blanco entra , y todos admirados de verlo esperando alguna orden, nos ponemos en fila todos los practicantes, nadie había faltado, y Humeres lidera el Zeiza: por primera vez en el pueblo con un Maestro de verdad en el frente. Sensei Inoue toma su posición, nos hecha una mirada de soslayo antes de darnos la espalda y tomar su lugar, Pedro ordena a viva voz ¡¡¡Seiza!!!, el Maestro baja su figura y nosotros a la misma vez lo hacemos tras El, ¡¡¡Mokuso!!! -suena la segunda orden-, y cerramos nuestros ojos y calmamos nuestra respiración, la emoción me traiciona, y no puedo dejar de pensar lo que se ha logrado, nuestra primera acción de meditación, pienso el gran paso que estábamos dando, no solo en Concordia sino en la región, ¡¡¡ MokusoIame!!! me sorprende y abrimos los ojos y saludamos al Sensei, y comenzamos. Sanabria conduce la gimnasia de entrada en calor, mirando con expectativa si había alguna corrección de parte del Maestro, nada ocurría y termina su rutina. Humeres nos forma en fila para comenzar la práactica y de allí en más fue todo Kihon¡, por primera vez oímos su voz y su orden de ejecución de movimiento que tanto tiempo nos imagináramos, una gran alegría nos recorrió el cuerpo, ya que conocíamos todas las técnicas que pedía en idioma japonés, pues de esa forma nos obligamos nosotros practicarlas, seguramente con algún defecto, pero en general todos lo hacíamos en correcta unidad.

La práctica del Kihon duró aproximadamente una hora, pero cuando llegamos a las técnicas de keri waza (golpes con las piernas), empezamos a flaquear, en un momento Sensei empieza su despliegue, y nos muestra un yoko gueri kekomi!, wauhh¡¡¡ soberbio, recto, la lona de su pantalón suena como un shock y su talón queda suspendido en el aire a la altura de la cara de Humeres, nos mirábamos entre nosotros y la admiración ya estaba de manifiesto, ilusos que creíamos que el mejor yoko gueri lo hacía Sanabria en las prácticas, el despliegue de sus bases expandidas nos dejó sin aliento, su impacto en el giaku zuki y el kime!!! parecían rasgar su chaqueta,  estábamos ante un Maestro de verdad, hablábamos en voz baja y quedamos admirados por su condición de karateka.

Las 2 horas se nos fueron increíblemente rápido, pero altamente transpirados! Terminó, la gente presente aplaudió su clase y se sorprendieron cuando al terminar repetimos fuerte elDojo Kun que leíamos del cuadro pintado y colgado frente a nosotros. La clase pasó a ser una exhibición, lo saludamos uno por uno, y nos retiramos. Notamos que le pide a Pedro que se quede porque le mostraría los detalles a corregirnos, aun no estábamos habituados a la verticalidad de la transmisión, intentamos quedarnos también, ávidos de absorber conocimiento, pero fue terminante, nos teníamos que ir, nuestro instructor debía corregir algunos detalles en la transmisión, los mayores lo llevarían a cenar, mi edad y mi bolsillo no permitían semejante gasto, así que solo me conformé con la espera de la práctica del Domingo a la mañana en el “Centro Español”, salón que si conocía por los bailes escolares de tarde llamados “vermouth”.

Enseguida anoté algunas cosas y palabras que Sensei Inoue pronunciaba, que no estaban en las figuras de libros editados generalmente en inglés, como Kakai ashi, Shigi Te, Todome.

El Domingo, allí estábamos nuevamente, luego del protocolo inicial y la entrada en calor, y repasamos detalles del día sábado, y comenzó la instrucción de Kata, alrrededor de cuarenta veces repetimos el Heian-Shodan, recién cuando se dió por satisfecho que lo habíamos entendido bien, nos explica el Heian-Nidan.

La clase siguió siendo intensa, pero lamentablemente terminó el tiempo de práctica, dejándonos en un halo de tristeza, y solo pensar en repetirlo era la solución para salir de ese estado, y así fue, una y otra vez, hasta formar la Asociación Entrerriana de Karate Shotokan.

Tomó su avión esa misma tarde-noche, dejándonos la huella a seguir para el resto de nuestras vidas…

     

Unir Constelaciones – Capítulo III

La usina fue el lugar donde mas tiempo pudimos estar, a pesar de la gran incomodidad del piso, sin ventanas, sin duchas pero con un gran amor a la práctica, donde amigos y conocidos se acercaban a ver que era el Karate o mejor dicho como lo practicábamos.

Cada tanto, alguien se paraba en la puerta y preguntaba si se podía integrar, así fue que dejamos de ser cinco personas, pero la rotación era constante, allí nos siguieron los hermanos Pérez (Jorge Pérez es hoy otro instructor histórico de aquella lucha en Paraná, Entre Ríos), Daniel Flores, Mazoletti  “lobito” para los amigos,  Meneguin (que fuera años después Director de la secundaria Artes Visuales. Los que mas recuerdo de aquella primera etapa, .- pero como en las películas, empezaron las rivalidades por algún motivo, escuelas escondidas de supuestas artes marciales empezaron a pulular por ósmosis, influenciada por la serie televisiva Kung-Fu, y a cuestionarnos, ¡¡a nosotros¡¡ que éramos el legado de Samurai en Concordia, si, así y todo habían practicantes de otras pseudo artes marciales, que nos veían en esa usina abandonada, y el comentario, que éramos unos chantas y que nuestro profesor no podía enseñarnos porque era un cinturón verde, en cambio ellos tenían 7mos y 9nos Danes.

Recuerdo que uno de esos instructores decía que era 3er Dan de Aikido (para que tengan una idea el Sensei Kurata era 3er Dan en aquella época), 4to Dan de Karate (Sensei Inoue era 2do Dan) y 2do Dan de Judo (Oscar Stractico Campeón Argentino), sumaba todos los Danes y entonces ostentaba el 9no Dan. ¡Me quería matar! ¡escuchar eso!. 

Y lo que enseñaba, por Dios! Un compañero de colegio practicaba con ellos y utilizaban ropa negra, yo le decía “vení con nosotros, ese es un chanta” (típica competencia adolescente) y empezábamos con las comparaciones técnicas en los recreos del colegio. Un día, este estilo de arte marcial, hace una exhibición en el Círculo Italiano. Sanabria, “Lobito” Mazoletti y Ruiz Díaz van a ver lo que hacían; en un momento después de demostrar técnicas combinadas (un desastre), pasan a realizar roturas, y al tocar la viga de madera en una prueba de acercamiento, antes del impacto en el brazo de un practicante, esta hace un crujido. 

¡Está preparada!, gritan Mazoletti y Sanabria, la gente se empieza a poner nerviosa porque obvio eran parientes y amigos de los exhibidores. Me cuentan que se acercan a las otras maderas después de la demostración y las ven preparadas con una espiga para que sea mas fácil la rotura. Obvio esto ofuscó a los de la exhibición, y terminó con insultos. La rivalidad había comenzado.

Al otro día fue el gran comentario en la práctica y Humeres nos reta: “¿Para que hacen eso? ¡Es peor!”, y al no saber que contestar, Sanabria responde: “nosotros tratamos de hacer un Karate serio y divulgarlo y esta gente enseña esa truchada engañando a la gente y a sus practicantes. Por el desconocimiento que hay de las artes marciales, les muestra un camino fácil diciendo que eso es Arte Marcial, y no es así”.

Yo solo escuchaba presenciando la discusión, y pasamos a practicar una vez terminados los distintos conceptos sobre el caso. Yo estaba en un todo de acuerdo con Tito. Al otro día en el colegio, mi compañero que practicaba ese estilo, me increpa de lo maleducado que fueron mis amigos de práctica, diciendo que estuvo re mal lo que hicieron, a lo cual respondí:  “Mirá Coronel, lo malo es engañar de esa forma al público con maderas preparadas”. Y se calló, no me habló más de karate. En el transcurso del año dejó su práctica, pero tampoco quiso empezar con nosotros.

Unos días después aparece una persona en la puerta y pide hablar con el instructor. Sanabria se da cuenta (era uno de los discípulos integrantes de aquella exhibición), y no deja que Humeres se involucre. -¿Quiere hablar con el instructor?-, Sanabria le dice: “Yo soy el instructor!”, y empiezan una discusión que termina con un desafío y duelo de Kumite en la playa Los Sauces, al siguiente día. No pude asistir, pero esta fue la narración de los presentes: 

Sanabria va acompañado con Mazoletti y Ruíz Díaz, y se encuentran con el contrincante, que se para entre la puerta de nuestra Usina y su maestro. Luego de un intercambio de ofensas, Mazoletti se cansa y los invita definitivamente a pelear, y le da tal paliza al contrincante que pide por favor arriba del capot del 4L de Sanabria, que no le pegue, mientras Tito trataba de que no le abollen el capot! Jajaja, Allí dicen que fue el fin de la discusión y de aquella escuela. Lobito hacia cuatro meses que practicaba con nosotros y su contrincante era cinturón Negro…

Corrió como reguero de pólvora, chusmerío de pueblo chico, pero increíblemente  aumenta la inscripción de practicantes en nuestro grupo.

Humeres y Sanabria toman una decisión que cambiará y afirmará el camino de la escuela Shotokan en la ciudad y en nuestras vidas en forma definitiva y sin más cuestionamientos.

 

“La gran decisión”: Traer al maestro de Pedro a Nuestra ciudad. Pedro nos indica que el quería conocernos, y comenzamos todos los preparativos para la gran visita y prueba de nuestro verdadero nivel de práctica.

Continuará